En una tristeza

No puedo hablar,
porque este nudo en mi garganta
amenaza con ahogarme.
Me molesta que seamos tan diferentes,
porque yo no tengo metas,
y no sé por qué ni para qué estoy viviendo.
Porque a mi me pasan los días,
y no alcanzo ni a saludarlos.
Mi tristeza es de hierro,
tan fuerte que nadie puede dañarla,
tan oxidada, tan quieta.
Mi tristeza, inmóvil, me observa.
me siente, me envuelve, me vive.
y tu ni te enteras.
Yo nunca me canso,
porque el cansancio se cansó de mi.,
de mi tristeza yo nunca descanso,
nunca descanso de esperarte.
Siempre esperando tu diferencia.
Tú, mi contrario.
siempre esperando estar molesta.
La tristeza no me abandona
ella me agrada y yo le agrado a ella.